Se había mencionado el nombre del pibe; o ya no tan pibe.... Pasa que el colonista lo vio cuando recién aprendía a afeitarse. “¿Ese es el que chico dijeron que andaba bien, el de las inferiores?”, se preguntaban entre hinchas. Mientras, César Andrés Carignano empezaba a hacer su trabajo.
El juvenil tuvo un par de años muy interesantes en la primera de Colón. Debutó con la casaca rojinegra el 13 de mayo de 2001, en un partido que el “sabalé” le ganó por 1 a 0 a Gimnasia y Esgrima de La Plata, con un tanto del volante Diego Castagno Suárez.
Hoy, el “Carigol”, tal cual se inmortalizó en las graderías del Brigadier López, tiene 25 años. El delantero freyrense tuvo su punto de ebullición durante el torneo Apertura del 2002, cuando fue el máximo anotador del conjunto que comandaba el “Patón” Edgardo Bauza. Más aún: Carignano jugó de titular ese certamen de punta a punta. Fue el mejor exponente en la ofensiva del elenco de barrio Centenario. Con su marca de once tantos en 19 fechas quedó segundo en la tabla de goleadores, detrás del “Cuqui” Andrés Silvera, quien integraba el plantel del Independiente campeón del “Tolo” Gallego.
Tenía que gritar... Antes de ser una auténtica bandera de Colón en cualquier césped del fútbol nacional, Carignano tuvo que “renegar” bastante. A su primer gol, lo convirtió el 29 de mayo de 2002 -un año y 16 días después de su debut en la primera del club-, cuando la escuadra rojinegra venció por 2 a 0 a Racing Club, en el estadio Brigadier López, por la décima jornada del torneo Clausura 2002.
Camino al sueño
Tanto el periodismo santafesino y nacional, como el hincha de Colón y diversos amantes del buen fútbol, se preguntaban por qué no César Carignano a la selección nacional. Pero, verdaderamente, había un marcado deseo de que el “Carigol” tenga la oportunidad de vestir tan mítica camiseta. Y tanto se habló que, finalmente, las sospechas sobre una posible convocatoria.
(...) Y el pibe le dijo riendo y llorando: "El club me ha mandado hoy la citación". Evocando el fantástico tango “El sueño del pibe” (Reinaldo Yiso), precisamente el anhelo de Carignano con la camiseta de Colón tuvo su bendición y pudo concretarse: recibió la citación un tiempo antes del viernes 31 de enero de 2003, día en el que debutó con el combinado argentino que venció a Honduras en un amistoso internacional. Los albicelestes ganaron por 3 a 1 a sus pares hondureños, partido que se disputó en el estadio Olímpico Metropolitano de San Pedro Sula.
Durante ese juego, César Carignano ingresó faltando dos minutos en reemplazo de Diego Milito, y participó tal tiempo en cancha más los cuatro minutos que adicionó el árbitro. “Al delantero de Colón le cobraron un foul que no fue y generó una importante jugada, cuando cedió con criterio el balón para el ingreso de Andrés D'Alessandro, que remató a uno de los palos del arco hondureño. Sin dudas fue promisorio lo hecho por el chico de Freyre, y más si se tiene en cuenta el poco tiempo que estuvo en la cancha, y por eso se espera que para alguno de los amistosos que faltan Marcelo Bielsa decida su inclusión en la formación titular”, había publicado El Litoral al día siguiente.
En declive
Tras ser el preferido de la parcialidad colonista, Carignano se fue del barrio Centenario a mediados de 2004. El Basel de Suiza compró su pase en números récords para aquel fútbol.
Allí, con el cambio que significa pasar de un país a otro totalmente distinto (“Acá son todos muy organizados. Es todo más frío. Para comer los fines de semana, se pacta varios días antes”, contaba el “Carigol” de su paso por la liga suiza), comenzó bastante en forma aceptable pero, muy rápido, las lesiones perjudicaron mucho su continuidad en las canchas. Su carrera deportiva cayó muchísimo, a tal punto que el atacante freyrense participó de 26 partidos en los últimos tres años y medio.
Durante 2007, el “Carigol” vivió una mala experiencia en México. El América lo contrató e inscribió en la lista de buena fe, ya que debía disputar la Copa Libertadores. Nuevamente, las lesiones trabaron el desarrollo de Carignano.
Ni un minuto alcanzó a disputar el oriundo de Freyre en las “Águilas” del América. De este modo, el técnico del equipo, Luis Fernando Tena, lo desafectó. Pero hoy, el “Carigol” vuelve a ponerse la camiseta que más satisfacciones le dio: sangre de un lato; luto del otro. Todo Colón ya lo palpita.
Ignacio Andreychuk
iandreychuk@ellitoral.com



































