La Municipalidad toma medidas preventivas por los excesos en los festejos de fin de ciclo escolar en Santa Fe
Buscan evitar los desmanes que se repiten cada año durante las celebraciones de egresados. Realizaron una reunión con alumnos, docentes y padres para coordinar acciones. “Es necesario intervenir para prevenir daños y vandalismo, que no se rompan las fuentes, ni se grafitee el Faro y las letras corpóreas de la ciudad”.”, dijo el intendente Poletti.
La Municipalidad toma medidas preventivas por los excesos en los festejos de fin de ciclo escolar en Santa Fe
Con la llegada de noviembre y los últimos días del ciclo lectivo, en la ciudad de Santa Fe comienzan a repetirse escenas que en los últimos años se convirtieron en motivo de preocupación para las autoridades municipales, escolares y familiares: grupos de estudiantes que, al celebrar el fin del cursado, protagonizan episodios de vandalismo, daños en edificios públicos o privados, consumo excesivo de alcohol y situaciones de riesgo en la vía pública.
Desde la Municipalidad señalaron que “es un tema que preocupa y que requiere abordaje conjunto con las escuelas, las autoridades, la policía y las familias”, y adelantaron que se evalúan nuevas medidas preventivas para este año. Entre ellas, la posibilidad de reforzar controles en zonas a las que habitualmente concurren, plazas y espacios públicos. Allí suelen concentrarse los grupos de egresados, así como un trabajo coordinado con las instituciones escolares.
Reunión para evitar inconvenientes en los festejos escolares. MCSF
Para prevenir incidentes, la Municipalidad organizó una reunión llevada a cabo este jueves por la mañana en la ex Estación Belgrano. La misma fue encabezada por el intendente, Juan Pablo Poletti, junto a representantes de Educación, Ambiente y Control municipal. Además participaron también alumnos, directivos y padres de distintas instituciones educativas de la ciudad.
Entre estos últimos representantes, participaron miembros de las escuelas Simón de Iriondo, Juana Del Pino, Juan Bustos, Domingo Cullen y Victoriano Montes. También de los colegios Inmaculada, La Salle, Calvario, Adoratrices y Dante Alighieri.
“Convocamos a las escuelas del macrocentro de la ciudad con un solo fin: poder escucharnos”, comenzó diciendo el intendente, Juan Pablo Poletti, luego de la reunión llevada a cabo este jueves por la mañana en los altos de la ex Estación Belgrano. “Se los convocó a los alumnos, padres, directivos, las secretarías de Control, Educación, Ambiente y la Intendencia, para ver la realidad de lo que se nos viene, que son los “UUD” (último último día), es decir, los festejos de fin de curso”.
Reunión para evitar inconvenientes en los festejos escolares. MCSF
“Queremos que los chicos se diviertan”, dijo Poletti, “pero en base a lo que ocurrió el año pasado y a principio de año, creemos que es necesario ocuparse de ver cómo puede ayudar el Municipio para prevenir daños y vandalismo, que no se rompan las fuentes, ni se grafitee el Faro y las letras corpóreas de la ciudad”.
“Los festejos son una cultura”, resumió Mariana Bonino, una de las alumnas que participó de la reunión. “Empieza con una joda que se suele hacer a la noche generalmente en las afueras de la ciudad, después volvemos juntos en colectivo a algún espacio público, una plaza o la Costanera, y cuando amanece vamos a la escuela a hacer la vuelta olímpica y festejar con el resto de los compañeros que se suman en ese momento”.
“El festejo se da durante varios días de la semana”, aclaró luego la alumna, y mencionó que hay quienes van a varios de estos festejos, porque hay un sistema de escuela organizadora y escuelas invitadas en la cultura de la joda promo”.
“Tratamos de que las familias nos acompañen en la organización de estos festejos”, dijo Mariana Mansutti, tutora de 5° año del Colegio Calvario, una de las asistentes a la reunión convocada por el Municipio. “Queremos que los padres sepan cómo es el festejo de sus hijos en la escuela”.
“Los alumnos tenemos que dialogar mucho en la escuela entre nosotros y con los directivos, llegar a acuerdos y charlar”, dijo Bonino. “Tenemos que charlar entre pares sobre los límites y hasta dónde queremos llegar, siendo conscientes de que es nuestro festejo y si nos mandamos una macana lo arruinamos”.
Reunión para evitar inconvenientes en los festejos escolares. MCSF
“Parece ser que todo el tiempo la solución es la prohibición, y acá lo que se nos propuso es pensar en conjunto soluciones como alumnos y como ciudadanos”, agregó la alumna.
-¿Qué les parece los patrullajes preventivos de la GSI?
-Está muy bueno, puede llegar a resolver conflictos que se dan siempre en la calle. No vienen para cancelar el festejo o restringirlo, sino para evitar inconvenientes.
Incidentes
En los últimos años, los llamados “UUD” (último último día) -de 5° año-, “PUD” (penúltimo último día) -de 4° año- o “festejos de fin de ciclo” del nivel medio derivaron en distintos incidentes. En 2023, por ejemplo, un grupo de alumnos arrojó pintura y harina dentro del edificio de una escuela céntrica, lo que obligó a suspender las clases por un día. En otra institución, estudiantes provocaron daños en el mobiliario y en vehículos estacionados frente al establecimiento. También se registraron casos de uso de pirotecnia en espacios cerrados y consumo de alcohol en la vía pública.
“Para ‘celebrar el fin de curso, salieron a cometer vandalismos”, tituló El Litoral hace algunos años atrás, sobre los hechos cometidos en la ciudad por un grupo de alumnos de 5° año -alrededor de 40- de un colegio privado. La consecuencia: los directivos suspendieron el acto de colación.
"Se nos fue de las manos", reconoció otro grupo de alumnos de 6° año de un colegio técnico perteneciente al ámbito universitario, al hacerse cargo de los desmanes ocasionados durante la celebración de fin de año, y pidieron disculpas a la institución y a la comunidad. Aquella vez “los servicios de emergencias pasaron horas trasladando al Hospital Cullen chicos y chicas en estado de ebriedad, algunos de ellos menores”, rezaba la crónica de El Litoral de 2018.
Las noticias sobre desmanes en los festejos de fin de curso se repiten año tras año en la ciudad de Santa Fe, como ocurre en otras partes. Los hechos afectan a las instituciones y espacios públicos de la ciudad. En ocasiones han llegado a vandalizar con pintura y daños materiales el cartel con las letras corpóreas que identifican a la ciudad, junto al Puente Colgante, sobre la Costanera, entre otros hechos.
Sin violencia
“Entendemos que se trata de un momento importante para los jóvenes, pero no puede transformarse en un hecho de violencia o de daño hacia la comunidad”, sostienen desde el Municipio. En ese sentido, remarcaron la necesidad de promover celebraciones cuidadas sin poner en riesgo la integridad de nadie.
“Dialogamos con sinceridad para ver cómo el Municipio puede ayudar previendo dónde podrían suceder hechos, el lugar, la hora de la juntada o la previa”, dijo el intendente. “Escuchamos a los alumnos y a las autoridades de las escuelas, agregó. “Sabemos que en la puerta de las escuelas termina la responsabilidad, pero los chicos cuando salen a la calle visten el uniforme y se identifican. ¿A dónde está la responsabilidad de los padres? Y también la de los alumnos”, reflexionó.
Las autoridades locales planean reforzar las campañas de concientización en redes sociales y en los propios colegios, con mensajes que apelen a la responsabilidad y a la convivencia. También se prevé la intervención de equipos municipales en las jornadas previas a los festejos, con el objetivo de prevenir situaciones que puedan derivar en incidentes.
En paralelo, desde algunas escuelas secundarias ya se están organizando reuniones con las familias para acordar pautas claras y recordar que los daños ocasionados en los edificios o en la vía pública pueden tener consecuencias legales.
“Queremos que los chicos celebren, que vivan ese cierre de etapa con alegría, pero sin que eso se convierta en un problema para ellos ni para los demás”, remarcaron desde el municipio.
Escucharse
“No queremos que esto sea un problema sino una celebración de fin de ciclo”, dijo Alicia Barletta, secretaria de Educación municipal. “Hay que escuchar a los estudiantes para entender de qué forma podemos llegar con nuestro mensaje para concientizarlos”.
También mencionó la funcionaria que entrecruzaron las fechas estimadas de cada celebración “para hacer un mejor trabajo en la ciudad y no afectar al vecino que también habita la ciudad y se levantará ese día para ir a trabajar o a sus ocupaciones”.
-¿Los controles serán policiales o de agentes municipales? -se le consultó al intendente.
-La idea es prevenir los hechos que puedan afectar para evitarlos y montar una limpieza de los sectores que lo necesiten luego del evento. Cuando determinemos los lugares y días, pondremos una ronda del binomio de GSI y la Policía para controlar cada lugar y evitar inconvenientes. También advertimos que no deben utilizar pirotecnia sonora, para evitar afecciones a personas con autismo y a animales.
Así, mientras la ciudad se prepara para despedir el año lectivo, el desafío será lograr que la fiesta de los egresados sea una celebración del esfuerzo y no una jornada marcada por el descontrol.