Enredos y contradicciones

El diputado provincial Federico Angelini declaró que “ante un escenario provincial de baja en la recaudación y uno nacional de enfriamiento de la economía, resulta una verdadera contradicción hablar en términos de aumento generalizado de impuestos tal como lo plantea el gobierno de Santa Fe, en el mensaje que envió a la Legislatura provincial”.

“Tanto es así que hasta los senadores de la UCR piden precisiones sobre el uso de los recursos por parte del Poder Ejecutivo, y se pide especial atención en la cuestión de los revalúos al sector agropecuario, donde da la sensación de que el socialismo le deja el terreno preparado al kirchnerismo para aumentar la presión tributaria sobre el sector”, enfatizó el legislador del bloque PRO.

“Finalmente, nos encontramos ante otra de las habituales comedias de enredos de los principales dirigentes del Frente, con peligrosas contradicciones, en este caso ante un tema tan sensible como lo es la posibilidad de la emisión de cuasimonedas: el ex gobernador Hermes Binner habló de que muchas provincias tendrán que hacerlo, el vicegobernador Jorge Henn lo descartó de plano al día siguiente, el gobernador Antonio Bonfatti dejó sembrada la duda en un reportaje apenas se bajó del avión tras su llegada de Alemania y 24 horas después intentó negar rotundamente lo que había afirmado un rato antes, intentando utilizar la remanida práctica de ‘matar al mensajero’, en este caso, minimizando el valor de la pregunta del periodista” expresó el diputado de Unión PRO Federal.

Por su parte, el justicialista Mario Lacava consideró que “emitir bonos sería estafar a los santafesinos, porque recibirían con ellos sólo el 60% al 70% del valor nominal, lo que consagraría una rebaja de un 30 al 40% en los sueldos y en los pagos a contratistas y demás proveedores a los que se les pague con dichos bonos tal como ocurrió en el 2001 con los federales entrerrianos y los otros bonos provinciales”, afirmó.

El legislador pregunta cómo se entiende esta debacle financiera “si el gobierno tiene un presupuesto de 33.500 millones de pesos para el año 2012 y si la recaudación aumenta en los primeros cuatro meses del año un 26% más que lo recaudado en el mismo período el año anterior y por encima incluso de la estimada en el presupuesto de este año”.

Se respondió que “el gobierno no puede seguir buscando excusas y responsabilidades externas para explicar y justificar una crisis de la que es el primer responsable. Tiene que mirar adentro de su propia administración y priorizar sus gastos con un sentido social y productivo, dejando de gastar en todo aquello que no sea imprescindible para mejorar los servicios que presta, atender lo social y hacer obras”.