¿Hay posibilidades de que se licite el servicio de recolección de residuos en la ciudad de Santa Fe?
Sigue “boyando” en el Concejo un proyecto que plantea la creación de una comisión ad hoc para elaborar el pliego de bases y condiciones que permita llamar a licitación pública la recolección domiciliaria de residuos y limpieza de calles. Los detalles.
¿Hay posibilidades de que se licite el servicio de recolección de residuos en la ciudad de Santa Fe?
Figura en el Concejo de Santa Fe un proyecto de ordenanza que pone en el tapete un tema clave para la ciudad capital: propone crear la comisión especializada para la formulación de las bases y condiciones para el llamado a licitación pública de la contratación del servicio de recolección domicialiaria de residuos, barrido y limpieza de calles.
No perdió estado parlamentario y, según el sistema de gestión de expedientes del Legislativo, el expediente (N° CO-0062-02041168-2) no se mueve desde el 22 de mayo de este año. Quedó “freezado” desde ese entonces en la comisión de Servicios Públicos.
El proyecto plantea que la comisión estará integrada por cuatro miembros del Ejecutivo Municipal; un concejal por cada bloque político que integre el Cuerpo deliberativo, y dos personas representantes de la Federación de Vecinales de la ciudad de Santa Fe.
Esta comisión “podrá efectuar consultas a referentes académicos, científicos, urbanistas, organizaciones civiles, sindicatos, entidades gremiales empresarias u otras personalidades que puedan aportar mejoras técnicas en los temas que considere indispensable. La consulta podrá efectuarse a través de una audiencia pública (Ordenanza Nº 10.825)”.
Cómo sería el trabajo
Dicha comisión, en el trabajo de formulación de los pliegos deberá tener en cuenta aspectos tales como “la transparencia pública en el cumplimiento del contrato, recepción y gestión de los reclamos de vecinos, y la calidad de prestación del servicio”.
También, la sustentabilidad del sistema, “priorizando la trazabilidad y separación de residuos en el proceso de recolección y traslado de los mismos, como así también el uso de tecnologías limpias en la prestación del servicio”.
En tercer lugar, la capacitación: “La prestadora del servicio no sólo debería capacitar a su personal y proveer los materiales que garanticen la seguridad e higiene, sino también colaborar con las campañas que lleve adelante el municipio, y detectar zonas con altos problemas (en la recolección domiciliaria)”, agrega el proyecto.
En algunos barrios el camión recolector no entra”, dice Mudallel. Crédito: Mauricio Garín
Respecto de la innovación y adaptación, la prestataria tendría que “incorporar estrategias para la gestión de nuevos tipos de desechos (tecnológicos, voluminosos, peligrosos, etcétera), promoviendo soluciones que permitan su tratamiento adecuado y minimicen su impacto ambiental”.
Una vez concluido el pliego de bases y condiciones para el llamado a licitación pública que dé lugar a la contratación y prestación del servicio de recolección de residuos, barrido y limpieza de calles, “el mismo será envíado al Ejecutivo para el llamado licitatorio respectivo”.
Breve racconto de la basura
La historia del sistema de recolección domiciliaria de residuos en Santa Fe comenzó en 1996: casi tres décadas En aquel entonces, el Concejo capitalino aprobó la ordenanza Nº 10.035, mediante la cual se concesionó el servicio a dos empresas.
Estas son Cliba Ingeniería Ambiental (S.A Tecsan Ingeniería SA, UTE), de Benito Roggio, y Urbaser (cuyo presidente es Carlos Adan Chocano), conformada por Argentina S.A. - Transportes Olivos SACI., y una UTE bajo el nombre de fantasía de Urbafe. Milicic SA opera en el relleno sanitario.
En esa norma de 1996 se aprobaron los pliegos para llamar a licitación del servicio. Pero la licitación cayó en saco roto: nunca se realizó. Desde aquel entonces a la actualidad, todo siguió un camino con distintos decretos y resoluciones municipales donde se prorrogaban las concesiones, y se readecuaban los precios a las prestatarias.
El sistema se mantiene a la fecha con renovaciones de Actas Acuerdos -o Actas de Compromiso- firmadas entre la Municipalidad local y las dos concesionarias. Incluso con la autorización de redeterminaciones de precios por cada prestación. Así se sigue prestando en la actualidad.
Con todo, el municipio capitalino sostiene con fondos de las arcas municipales este servicio. Como informó oportunamente El Litoral, de acuerdo al Presupuesto Municipal 2025 -vigente-, el cálculo de gastos para la administración central es de $225.046.038.799.
Un elemento que surgió (del Presupuesto 2025) es la asignación de un solo servicio, que es la recolección de residuos, barrido y limpieza: el presupuesto para esta prestación -concesionada a Cliba y Urbafe- es de $41.006.641.729. Es decir, que ese servicio representa un 18,22% del total presupuestario, contó este diario.
Fundamentos
El proyecto es de la concejala Jorgelina Mudallel, con la coautoría de su par del Bloque PJ, Jorge Fernández. “Si bien la normativa vigente ha sido ampliada ante Resoluciones, y/o Convenios (…), no son estas normas de rango máximo”, dicen los legisladores locales.
Esto “implicó con el correr del tiempo la ausencia del acto público de licitación, impidiendo que nuevos oferentes puedan ofrecer sus servicios, como también una nueva discusión del contrato de forma participativa ante la evolución en los aspectos como sostenibilidad, impacto ambiental, nuevos tipos de residuos, etcétera”, aducen.
Si bien el Ejecutivo ha trabajado e incluido en las discusiones constantes de precios y prórroga del servicio -separación de residuos, implementación de la línea 0800 para que se efectúen reclamos con las empresas concesionarias (Ord. Nº 11.059/2004)-, “resulta imprescindible que estos términos figuren en un nuevo pliego licitatorio”, insisten.
La basura, siempre un problema en la capital provincial. Crédito: Archivo
En este contexto, aparece la “precariedad normativa y legal” de la prestación del servicio, añaden.
Con todo, el proyecto en ciernes “refleja la necesidad de la elaboración de un nuevo pliego que determine las bases y condiciones para el llamado a licitación pública, que dé lugar a la contratación y prestación del servicio de recolección de residuos, barrido y limpieza de calles, y su posterior implementación”, cierran los ediles.
“Falta intención”
En diálogo con El Litoral, Mudallel respondió el interrogante que titula este artículo. Consideró que para que se dé la posibilidad, sería necesario que desde el oficialismo en el Concejo y el municipio “haya una intención política de retomar este tema, que es muy importante para la ciudad”.
“Hay que hablar otra vez de que el relleno sanitario tiene una vida útil a muy corto plazo, o que hay microbasurales por todo el norte de la ciudad. Es cierto que el vecino debe ser responsable con la basura que genera; pero si no hay una recolección efectiva de los residuos, el problema va a seguir”, declaró.
Para Mudallel, “debe haber una política pública que empuje a la gente a hacerse cargo de los residuos que genera, pero a la par, que el municipio garantice una recolección eficiente. Si no va a entrar el camión recolector en ciertos barrios por el estado de las calles, que arreglen la calle”.
“La otra alternativa -prosiguió- sería poner containers en las cuadras, pero que éstos se recolecten con la debida periodicidad. De lo contrario, se seguirán generando micro basurales a cielo abierto”, concluyó.