El Gobierno nacional declaró el estado de emergencia y/o desastre agropecuario en distintas zonas productivas de la provincia de Neuquén, como consecuencia de la severa sequía que viene afectando a amplios sectores del territorio provincial.
A través de una resolución del Ministerio de Economía, el Gobierno nacional declaró el estado de emergencia y/o desastre agropecuario en distintas zonas de Neuquén, afectadas por la sequía, con vigencia hasta junio de 2026.

El Gobierno nacional declaró el estado de emergencia y/o desastre agropecuario en distintas zonas productivas de la provincia de Neuquén, como consecuencia de la severa sequía que viene afectando a amplios sectores del territorio provincial.
La medida fue oficializada mediante la Resolución Nº 2123/2025 del Ministerio de Economía, firmada por el ministro Luis Caputo, y se enmarca en lo establecido por la Ley Nº 26.509 de Emergencias y Desastres Agropecuarios.
La decisión se adoptó a partir de la recomendación elevada por la Comisión Nacional de Emergencias y Desastres Agropecuarios (CNEyDA), que durante su reunión del pasado 20 de noviembre realizó un análisis técnico detallado de los eventos climáticos adversos y su impacto sobre la producción agropecuaria neuquina.
En ese ámbito, se evaluaron informes climáticos, productivos y económicos que dieron sustento a la solicitud formal presentada por el Gobierno provincial. Como resultado, la Comisión convalidó el Decreto Provincial Nº 1.303, dictado el 17 de octubre de 2025, mediante el cual Neuquén había declarado la emergencia agropecuaria a nivel local.
De acuerdo con la resolución nacional, el estado de emergencia y/o desastre agropecuario regirá desde el 1º de julio de 2025 hasta el 30 de junio de 2026, alcanzando a las explotaciones ganaderas, forestales, acuícolas y apícolas afectadas por la falta de precipitaciones.
La declaración comprende a la totalidad del territorio provincial, con excepción de los valles irrigados de los departamentos Añelo y Confluencia, que no presentan el mismo grado de afectación.
La normativa permitirá a los productores comprendidos en la emergencia acceder a los beneficios previstos en la ley, como prórrogas o exenciones impositivas, reprogramación de obligaciones crediticias y acceso a herramientas de asistencia financiera, con el objetivo de mitigar las pérdidas productivas y facilitar la continuidad de las actividades.
La reunión de la CNEyDA contó con la participación de representantes de diversos organismos nacionales, entre ellos el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el Banco de la Nación Argentina, el Banco Central, ARCA, el Ministerio del Interior y el propio Ministerio de Economía.
Asimismo, estuvieron presentes delegados de las principales entidades representativas del sector agropecuario, como Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Federación Agraria Argentina (FAA), Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Sociedad Rural Argentina (SRA), CONINAGRO y el Foro Nacional de Agricultura Familiar (FONAF), junto a representantes del gobierno provincial.
De esta manera, el Gobierno nacional dio respaldo institucional al pedido de Neuquén y formalizó una herramienta clave para acompañar a los productores afectados por uno de los fenómenos climáticos más adversos de los últimos años, en un contexto donde la sequía continúa condicionando la actividad agropecuaria en amplias regiones del país.




