Miguel Ángel Russo fue presentado oficialmente como entrenador de Boca Juniors este jueves en el predio de Ezeiza, tras su controvertida salida de San Lorenzo. En conferencia, evitó dramatizar pero apuntó con dureza: “Se dijeron muchas cosas y tonterías”. Estará al frente del equipo hasta diciembre de 2026.
Rodeado por su cuerpo técnico y acompañado por Juan Román Riquelme, el DT de 69 años inicia su tercer ciclo en el club con la mirada puesta en el Mundial de Clubes. “Sé lo que es el mundo Boca. Lo disfruto. Es una alegría inmensa estar en este momento”, dijo Russo, visiblemente emocionado.
El respaldo de Román
El acto comenzó con unas palabras de Riquelme: “Hoy es un día distinto. Presentamos al último DT que nos regaló la Libertadores. Además, es mi amigo. Vamos a ayudarlo. Te quiero y felicidades”. El vicepresidente fue el artífice del regreso, como en 2020, cuando Russo volvió tras su paso por Cerro Porteño.
La historia entre ambos se remonta a 2007, cuando juntos conquistaron la Copa Libertadores. Ahora, con una relación estrecha pero cuestionada por los modos de su reciente contratación, vuelven a apostar por una sociedad que ya dio resultados.
La salida de San Lorenzo, en la mira
Consultado sobre la polémica renuncia en Boedo, Russo aseguró: “La mayoría de lo que se dijo no es verdad. Siempre tuve diálogo con Román. No antes de la semifinal, como dijeron. El mundo del fútbol respeta los tiempos. Hay códigos”. San Lorenzo había exigido inicialmente dos millones por su rescisión.
Finalmente, el técnico abonó 300 mil dólares y logró la liberación. En Boedo, sin embargo, las heridas siguen abiertas. Dirigentes y socios reprochan su salida intempestiva, mientras el mural con su rostro ya fue borrado en el estadio.
Miguel Ángel Russo volvió a BocaUn ciclo con sed de revancha
“Estoy feliz, me gusta lo que hago y estoy bien con mi cuerpo técnico. Vamos a competir con seriedad y planificación”, aseguró Russo. En su anterior etapa, ganó la Superliga 2020 y la Copa Diego Maradona. Esta vez, su primer objetivo será el Mundial de Clubes en Miami.
El debut será el lunes 16 de junio ante Benfica en el Hard Rock Stadium. “Boca se merece estar en este torneo por su grandeza. Hay que representarlo como corresponde”, expresó. Mientras tanto, Roberto Pompei y Silvio Rudman dirigen las prácticas en Ezeiza.
Russo también habló de su evolución como entrenador: “El fútbol cambió. Antes hablábamos con los padres. Hoy los jugadores tienen otra lógica. Hay que entenderlos. Me sigo capacitando, sigo aprendiendo. Si estoy acá es porque me siento bien y capaz”.
Además, reconoció que no esperaba volver: “No estaba en mi mente que apareciera Boca. Pero apareció después de la eliminación. No antes. La pandemia nos cortó mucho en el ciclo anterior. Esta es una oportunidad distinta”.
Miguel Ángel Russo volvió a BocaVelasco, Battaglia y el armado
Sobre la conformación del plantel, fue prudente: “Estamos hablando en lo colectivo y en lo individual. Velasco estuvo mucho tiempo afuera. Hay que fortalecerlo. Román y el Consejo se están moviendo, pero hasta que no se concrete, calma”.
Cerró la conferencia con una frase de estilo propio: “El jugador es lo más importante. Es clave el compromiso, el juego. El fútbol es un deporte colectivo. Siempre fue así. Y en Boca, más que nunca”.