El 19 de octubre está considerado el Día Internacional del Gin Tonic, un trago muy de moda por estos días. Pese a lo requerido por estos tiempos, la bebida tiene su historia legendaria y para prepararla es necesario cumplir con una serie de ingredientes claves para un sabor óptimo.
Algún cítrico: limón, lima, naranja…
Vaso; uno adecuado y con la capacidad suficiente para hacer la mezcla.
Se recomienda no usar un vaso de tubo, común. Su capacidad es más reducida para mezclar la bebida con el hielo y el cítrico. Lo ideal para un gin tonic es servirlo en un vaso frío y que debe ser una copa de balón o un vaso de sidra.
El LitoralEl hielo debe ser grande, compacto y duro. Su función es enfriar, no aguar el cóctel. El hielo no debe sobresalir por encima del vaso. Se recomienda cuatro o cinco piezas.
El LitoralLa ginebra debe estar fría para retrasar que se derrita el hielo. Es la bebida que primero hay que poner en la copa, puesto que en todos los cocteles siempre va primero la bebida de mayor graduación alcohólica.
Para servir bien la ginebra es aconsejable echarla desde una cierta altura. Con este pequeño detalle se consigue que permita oxigenarse y liberar sus aromas mientras rueda por los hielos.
El LitoralCuando se sirva la tónica se debe inclinar el vaso y deslizarla por el cristal para que no pierda sus burbujas.
El LitoralAñadir un cítrico es perfecto para aromatizar cualquier gin tonic. Además los cítricos se puede frotarlos levemente sobre el borde de la copa para aromatizarla. El limón y la lima son los cítricos que mejor combinan con el gin tonic, pero no los únicos.
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Las proporciones correctas para elaborar un buen gin son de 50 mililitros de ginebra (entre 50 y 60 sería lo adecuado) y 200 mililitros de tónica. Con esas proporciones, el drink tendrá unos 8 grados aproximadamente.
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