Una iglesia de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, situada en Grand Blanc (Michigan), fue blanco esta mañana de un tiroteo e incendio que dejó un saldo de al menos seis personas alcanzadas por disparos, sin que hasta ahora se conozca con precisión el número total de víctimas.
Las autoridades locales confirmaron que el atacante fue abatido y que las llamas ya no representan una amenaza latente. El lugar, ubicado a unos 13 kilómetros de Flint y a cerca de 80 de Detroit, fue evacuado mientras los equipos de emergencia se abocaban a controlar la conflagración y auxiliar a los heridos.
Primer momento del ataque: disparos y fuego
El episodio se registró en la iglesia situada en McCandlish Road, en un área rodeada por viviendas y otra iglesia cercana. Testimonios y videos compartidos en redes muestran densas columnas de humo y llamas que consumían buena parte del edificio mientras bomberos trabajaban para contener el incendio.
La magnitud demandó activar una quinta alarma, y se teme un colapso parcial de la estructura.
Mientras tanto, los cuerpos de auxilio desplegaron brigadas médicas, policías y bomberos. Las autoridades pidieron que la zona permanezca despejada para facilitar la circulación y las maniobras de rescate.
Algunas fuentes oficiales indicaron la presencia de personas atrapadas dentro del templo mientras se extendían las llamas. Aunque no se reveló un balance final de heridos o fallecidos, medios locales informaron que al menos seis personas habrían sido alcanzadas por disparos.
La iglesia antes del ataqueRespuesta institucional y contexto religioso
El departamento de policía confirmó que el agresor fue neutralizado durante el operativo, lo que descartaría una amenaza en curso. En paralelo, se habilitaron centros de reunificación en un pabellón ubicado al norte del lugar y en el teatro Trillium, en Holly y McCandlish, con el fin de asistir a familiares de las víctimas.
Entre las reacciones, el representante John James expresó su solidaridad en redes sociales con los afectados. No se brindaron detalles públicos sobre la identidad del atacante ni la motivación detrás del atentado.
Una iglesia fue blanco esta mañana de un tiroteo e incendioEl suceso ocurre un día después del anuncio del fallecimiento de Russell M. Nelson —hasta este sábado presidente de la Iglesia mormona— quien murió a los 101 años en Salt Lake City.
Nelson había liderado la institución desde 2018 y promovió reformas significativas al interior del credo, incluyendo la eliminación del término “mormón” para promover el uso del nombre completo de la iglesia.
Durante su tiempo al frente, impulsó además la expansión global de templos, introdujo cambios en los servicios dominicales, y promovió una apertura frente a temas de diversidad y política social.