La intendente Ana Maribel González acompañó a jóvenes Sanjavierinos en la entrega de aportes del programa Eureka
Los beneficiarios de esta edición fueron Rodrigo Ojeda, Leandro Benítez, Tomás Saba, Alan Ramírez, Sofía Chelini y Maira Gutiérrez, quienes presentaron propuestas con fuerte enfoque territorial y compromiso social.
La intendente Ana Maribel González acompañó a jóvenes Sanjavierinos en la entrega de aportes del programa Eureka
La intendente de San Javier participó esta tarde junto al Área Joven de la Municipalidad de San Javier de la entrega de aportes a jóvenes del distrito cuyos proyectos fueron seleccionados en el marco del programa provincial Eureka, una iniciativa que impulsa la participación juvenil y el desarrollo comunitario. La actividad se llevó a cabo en la Casa del Senado.
Los beneficiarios de esta edición fueron Rodrigo Ojeda, Leandro Benítez, Tomás Saba, Alan Ramírez, Sofía Chelini y Maira Gutiérrez, quienes presentaron propuestas con fuerte enfoque territorial y compromiso social.
Eureka está dirigido a jóvenes de entre 15 y 29 años y tiene como objetivo fomentar su protagonismo mediante la creación de proyectos grupales y comunitarios. Las iniciativas seleccionadas buscan prevenir situaciones de violencia, promover vínculos saludables y generar oportunidades de desarrollo personal, laboral, cultural y social en sus territorios.
Al respecto, la intendente González expresó:
“Es un orgullo ver cómo nuestros jóvenes se involucran activamente en transformar su realidad. Estos proyectos no solo reflejan compromiso, sino también creatividad y amor por la comunidad. Desde el municipio vamos a seguir acompañando y generando espacios donde sus ideas puedan crecer y concretarse.”
Eureka
Este programa tiene como objetivo promover la participación activa de las y los jóvenes de entre 15 y 29 años, mediante la creación de proyectos territoriales y grupales que generen oportunidades de desarrollo personal y colectivo.
Se busca que estos proyectos contribuyan a la prevención de situaciones de violencia y conflicto, enfocándose en fortalecer vínculos saludables y lazos comunitarios en el territorio.
Las actividades propuestas deben ser de carácter socio-comunitario, con el fin de generar un impacto positivo en sus comunidades, promover el acceso de las juventudes a sus derechos fundamentales, y ampliar sus oportunidades laborales, sociales, económicas, culturales, entre otras.