Alejandro Sanz respondió a las acusaciones de su ex fan: “Me ofreciste un negocio y te dije que no”
El cantante español se defendió públicamente tras el testimonio de Ivet Playà, quien lo acusó de manipulación. Sanz aseguró que el vínculo fue entre adultos y deslizó que las denuncias comenzaron luego de rechazar una propuesta comercial.
Alejandro Sanz respondió a las acusaciones de su ex fan: “Me ofreciste un negocio y te dije que no”
Alejandro Sanz volvió al centro de la escena mediática tras las declaraciones de Ivet Playà, una joven catalana que lo conoció cuando era fan y con quien, según sus palabras, mantuvo un vínculo íntimo y profesional. Playà, ahora de 28 años, compartió en redes sociales un video en el que denuncia haber sido manipulada emocionalmente por el cantante, lo que le generó un profundo impacto psicológico.
El relato de la joven se volvió viral y generó un fuerte debate en redes sobre los límites éticos en las relaciones entre figuras públicas y admiradores.
Playà compartió en redes sociales un video en el que denuncia haber sido manipulada. Crédito: NA.
La versión de Alejandro Sanz
Frente a la creciente repercusión del testimonio, Sanz publicó un mensaje en sus redes sociales el lunes 17 de junio. En su comunicado, el cantante expresó: “Lo que tú y yo compartimos fue un recuerdo muy bonito entre personas adultas, compartiendo su cariño y siendo libres.”
Además, reveló un detalle hasta ahora desconocido: Ivet le habría ofrecido participar en un negocio familiar el mes pasado. Según Sanz, él rechazó la propuesta tras consultar con sus asesores, y a partir de allí comenzaron las acusaciones públicas.
“En mayo me ofreciste invertir en unos negocios familiares tuyos. Te dije que no. Hablé con mis asesores y me desaconsejaron entrar en ello. Poco después apareció este video”, escribió el artista, dejando entrever una conexión entre ambos hechos.
Sanz publicó un mensaje en sus redes sociales. Crédito: @alejandrosanz.
Las denuncias de Ivet Playà
Ivet, en su testimonio, narró cómo pasó de ser una fan del cantante a mantener una relación cercana cuando tenía 18 años y él, 49. Aseguró que Sanz aprovechó esa diferencia de poder para manipularla y que el vínculo la dejó emocionalmente devastada.
Contó también que, tiempo después, se trasladó de Barcelona a Madrid para trabajar con el equipo de Sanz, lo que dio una nueva dimensión a la relación, esta vez en el plano laboral.
“Me sentí utilizada, humillada, incluso sucia”, dijo la joven en su video.
La situación generó una ola de repercusiones en medios de España y América Latina, donde seguidores y críticos del cantante debatieron sobre la veracidad del testimonio de Ivet y la respuesta del artista.
En redes, muchos usuarios plantearon la necesidad de analizar el caso bajo la lupa del poder simbólico que ejercen figuras públicas sobre sus fans, especialmente en relaciones con gran diferencia de edad y fama.
Mientras Alejandro Sanz sostiene que el vínculo fue consensuado entre adultos y se muestra dolido por el giro que tomó la historia, Ivet Playà reafirma su testimonio de haber sido manipulada. Más allá de las posturas, el caso abre interrogantes sobre los límites en las relaciones entre ídolos y seguidores, y la necesidad de abordar estos temas con responsabilidad y perspectiva.