La campaña de Sydney Sweeney para una marca de jeans despertó una oleada de críticas
El eslogan “Great Jeans” utilizado en la nueva campaña protagonizada por la actriz de Euphoria fue interpretado por muchos como una referencia velada a la superioridad genética, lo que encendió la polémica en redes sociales.
La campaña de Sydney Sweeney para una marca de jeans despertó una oleada de críticas
La reconocida actriz estadounidense Sydney Sweeney, conocida por su papel en Euphoria, protagoniza la nueva campaña publicitaria de American Eagle. La campaña fue lanzada esta semana en Estados Unidos con un gran despliegue en vía pública y plataformas digitales, bajo el lema “Great Jeans” (“Grandes jeans”), un juego de palabras que también puede leerse como “Great Genes” (“Buenos genes”).
El mensaje, que inicialmente parece una estrategia creativa para destacar la calidad de la indumentaria, no tardó en generar controversia.
Usuarios en redes sociales cuestionaron la frase y señalaron que, al estar acompañada por la imagen de Sweeney —rubia, de ojos claros y contextura delgada—, podría interpretarse como una referencia a ideales de belleza asociados históricamente a la supremacía blanca y a la eugenesia.
Reacciones divididas en redes sociales
Las críticas no se hicieron esperar en plataformas como X. Algunos usuarios señalaron que la campaña “promueve la eugenesia aria” y acusaron a American Eagle de utilizar un mensaje poco inclusivo.
“La frase ‘great genes’ tiene una historia cargada de racismo y exclusión. No es casual que la imagen elegida sea una mujer blanca con rasgos eurocéntricos”, escribió una usuaria. Otros compararon la elección con discursos elitistas en el mundo de la moda y el entretenimiento.
En contraste, hubo también defensores de la campaña. La periodista conservadora Megyn Kelly desestimó la polémica, calificando las críticas como “absurdas” y asegurando que “no hay ninguna referencia racial, simplemente están hablando de jeans, no de genética”.
La campaña de Sydney Sweeney para una marca de jeans despertó una oleada de críticas.
Impacto económico y repercusión comercial
A pesar —o quizás debido— a la controversia, American Eagle experimentó una fuerte reacción positiva en el mercado. Las acciones de la compañía subieron más de un 6 % tras el lanzamiento de la campaña, y algunos informes indicaron un crecimiento del 22 % en operaciones posteriores. La viralización en redes impulsó el alcance de la marca, especialmente entre el público joven.
La campaña también incluyó la presentación de una edición limitada de pantalones, llamada The Sydney Jean, cuyos ingresos netos serán destinados a la organización Crisis Text Line, que ofrece asistencia en salud mental. Aunque este gesto fue valorado por algunos sectores, otros lo consideraron insuficiente frente a las críticas sobre la carga simbólica del mensaje.
La campaña logró visibilidad, impacto comercial y, al mismo tiempo, encendió un debate profundo.
¿Marketing audaz o insensibilidad cultural?
El caso reabre el debate sobre los límites de la creatividad publicitaria y la responsabilidad de las marcas al momento de comunicar. ¿Es válido utilizar juegos de palabras que puedan tener múltiples lecturas, incluso aquellas con carga histórica negativa? ¿Qué responsabilidad tienen las empresas al seleccionar los rostros que representan sus productos?
American Eagle aún no emitió un comunicado oficial respecto a la polémica, mientras el tema sigue generando reacciones encontradas en todo el mundo.
La campaña logró visibilidad, impacto comercial y, al mismo tiempo, encendió un debate profundo sobre representaciones, simbolismos y la sensibilidad cultural en la publicidad moderna. Una muestra más de cómo el marketing de hoy ya no se mide solo en ventas, sino también en el termómetro social.