Pasó la reunión de la comisión directiva de Colón con quienes tomaron parte de las últimas elecciones y se decidió confirmar la fecha del 30 de noviembre para las elecciones, con posterior entrega del poder al día siguiente.
Este sábado se produjo la convocatoria de la comisión directiva sabalera a quienes participaron de las últimas elecciones. No fue Ingaramo, que se había presentado hace dos años por el “vignattismo”.

Pasó la reunión de la comisión directiva de Colón con quienes tomaron parte de las últimas elecciones y se decidió confirmar la fecha del 30 de noviembre para las elecciones, con posterior entrega del poder al día siguiente.
Todos estuvieron de acuerdo con esta decisión, que permitirá que el grupo que resulte electo para el gobierno de la institución por los próximos dos años, cuente con tiempo suficiente para el armado del plantel y la realización de la pretemporada, algo que complicó a los actuales dirigentes teniendo en cuenta la fecha que se puso a las últimas elecciones y la demora de la anterior gestión en entregar el poder, hecho que se concretó recién el 28 de noviembre, a menos de un mes del inicio del campeonato y a cuatro días del comienzo de la pretemporada.
Por la comisión directiva estuvieron el presidente Víctor Godano acompañado de uno de los vicepresidentes, Germán Williner, el secretario Pedro Passeggi, el tesorero Adrián Temporelli, el secretario coordinador José Pisarello y la encargada de relaciones públicas, Flavia Stelhick. Del otro lado, concurrieron Ricardo Luciani, Ricardo Magdalena, Gustavo Abraham y Luis “Clemente” Valdez. Faltó a la cita Gustavo Ingaramo, que fue el candidato a presidente por el anterior oficialismo (el de Vignatti) en el anterior proceso electoral.
“Nunca una comisión llamó a los que participaron en elecciones y a eso lo consideramos como una apertura que nos deja muy conformes. La reunión fue muy productiva”, coincidieron los que estuvieron presentes en el encuentro. “Tenemos un desfasaje, como por ejemplo el dinero que Platense tiene que pagar por la compra de Picco que todavía no recibimos, pero más allá de algunos contratiempos, estamos en un cierto nivel de equilibrio”, señalaron desde la actual dirigencia.
Se habló del tema Espínola (“no queda otra que pagar, para evitar que el club sea inhibido y no pueda realizar incorporaciones en el próximo mercado de pases. Trataremos de arreglar para que sea en cuotas, pero lo vemos difícil”, señalaron) y también del tema Farías, aunque en este caso hay cuestiones que juegan a favor del club en el reclamo judicial por el 15 por ciento que el ex jugador reclama y todavía deben cumplirse pasos procesales.
Respecto de la situación actual, se mencionó que, en promedio, están pagando unos 22.000 socios y que el gasto mensual del club, contando todo lo que egresa, está en el orden de los 520 millones, que por el momento está controlable.
Cuando finalice este campeonato, habrá unos diez jugadores que se quedarán porque son los que tienen contrato, sumados a los chicos del club. Es decir que habrá que hacer un mercado de pases con la venida de una buena cantidad de futbolistas para el armado del próximo plantel, algo que se cae de maduro teniendo en cuenta la pésima campaña que se viene cumpliendo con los actuales jugadores. La depuración se daría de manera natural y es algo inevitable por lo antes señalado en cuanto al rotundo fracaso deportivo de este proceso.
Quedó flotando en el ambiente que hay conformismo con la administración económica, luchando con un “agujero negro” grande que se produjo por los juicios que hubo que afrontar y la realidad económica con la que se inició este proceso, obviamente con una fuerte autocrítica hacia lo futbolístico, que termina siendo el aspecto más deficitario de esta gestión.
También se resolvió enviar un petitorio a la AFA firmado por todos los que formen parte del proceso electoral y la actual gestión, para la continuidad de las inferiores en el torneo de Primera, que se constituyó en uno de los pocos hechos futbolísticos positivos que se dio en este año.
En consecuencia, esta comisión directiva deberá convocar entonces, a fin de este mes (con 60 días de anticipación establece el estatuto) a elecciones para el 30 de noviembre, pero antes deberá llevar a cabo la asamblea general ordinaria en la que se evaluará la Memoria y Balance del ejercicio cerrado el 30 de junio de este año, que corresponde en forma completa a la actual gestión de Godano. El anterior ejercicio tuvo la particularidad de tener seis meses de la gestión Vignatti y seis de Godano, situación que fue reflejada en la Memoria dejando constancia, la actual gestión, de que había cuestiones que se debían revisar de lo que fueron los últimos meses del gobierno de Vignatti.




