A partir del domingo 1° de junio, los precios de los combustibles volverán a incrementarse en las estaciones de servicio de todo el país. La petrolera estatal YPF aplicará una suba de entre 10 y 14 pesos por litro, lo que representa un aumento promedio del 1%.
El ajuste responde a una actualización del impuesto a los combustibles líquidos, definida por el Gobierno nacional, que impacta directamente en los valores finales de la nafta y el gasoil. Este nuevo incremento ocurre en un contexto de alta sensibilidad en el mercado y afecta tanto a usuarios particulares como a sectores productivos que dependen del transporte.
Con el nuevo cuadro tarifario, el litro de nafta Súper pasará a costar $1.184.Nuevos valores y posible efecto en otras empresas del sector
Con el nuevo cuadro tarifario, el litro de nafta Súper pasará a costar $1.184, mientras que la nafta Premium ascenderá a $1.403. En cuanto al gasoil, el tipo común alcanzará los $1.190 y el Eurodiesel, los $1.374. Estos precios corresponden a estaciones de servicio de la Ciudad de Buenos Aires, y en el interior del país pueden ser incluso mayores por costos logísticos.
Se espera que en el transcurso de la semana otras compañías del rubro, como Shell, Axion y Puma, también trasladen esta actualización impositiva a los surtidores, replicando los aumentos en sus respectivas redes.
Shell, Axion y Puma también aplicarían subas en los próximos días por la actualización impositiva.Un mes marcado por variaciones en el precio de los combustibles
Durante mayo, los combustibles ya habían registrado dos modificaciones en sus precios. En los primeros días del mes, YPF aplicó una baja promedio del 4%, motivada por la caída en la cotización internacional del petróleo. Sin embargo, a mediados de mes, se corrigieron nuevamente los valores al alza —entre 0,2% y 0,46%— para compensar un aumento en el costo de los biocombustibles.
Con esta nueva suba impositiva que entra en vigencia desde el 1° de junio, se consolida una tendencia de incrementos sostenidos que genera preocupación entre consumidores y transportistas por el impacto acumulado en el costo de vida.