Ángel Ariel Ortíz, de 28 años, está acusado de ser el ladrón que asesinó a Walter Paglia en barrio Jardín Mayoraz de la ciudad de Santa Fe, en junio del año pasado. Luego de una extensa y minuciosa investigación, fue identificado en base a distintos elementos que fueron revelados este viernes, durante una audiencia de medidas cautelares en la que se dictó la prisión preventiva en su contra.
Walter murió en su dormitorio, el que compartía con uno de sus hijos, un adolescente que tenía 15 años en ese momento. La madrugada del viernes 13 de junio de 2024, en su casa de calle Castelli al 3000, el hombre despertó sobresaltado cuando el asaltante estaba al pie de su cama.
La víctima temió por su familia (también su hija de 20 años descansaba en otra habitación) y sin pensar se abalanzó sobre el “visitante”, que estaba armado con algún tipo de elemento cortopunzante.
Paglia era alto y fuerte, pero el criminal logró apuñalarlo dos veces en el pecho y dejarlo fuera de combate. Las estocadas afectaron órganos vitales y sellaron la suerte del dueño de casa, que falleció instantes más tarde.
El homicida escapó del lugar. Se llevó un teléfono celular, un reloj y una billetera que tenía 2 mil pesos y documentación de la hija de Paglia.
El presunto autor del crimen, captado por una cámara de vigilancia. Foto: ArchivoRastro
El fiscal del caso, el doctor Andrés Marchi, encomendó las actuaciones a la Policía de Investigaciones (PDI), que inmediatamente dispuso una serie de trabajos de inteligencia para llegar a la identidad del autor del hecho.
Los documentos de la joven fueron hallados ese día en una de las esquinas que forman la avenida Facundo Zuviría y calle Boneo. Así, los detectives pudieron comenzar a reconstruir el camino de huida que tomó el asesino.
En imágenes de cámaras de vigilancia privadas de la zona, observaron al sospechoso acercándose a la escena del crimen y luego alejándose del lugar. Los horarios coincidían a la perfección.
Los videos mostraban a un joven con zapatillas blancas, vestido con pantalón achupinado y abrigado con un “montgomery”. Al tomar distancia de la casa de la familia Paglia, se lo podía observar manipulando lo que parecía una billetera.
El fiscal del caso, el doctor Andrés Marchi. Foto: ArchivoRecompensa
Antes de que termine 2024 se tomaron dos medidas que terminaron siendo cruciales.
En primer lugar, el Ministerio de Justicia y Seguridad de la provincia ofreció una recompensa de 10 millones de pesos para quien aportara datos sobre el criminal. Por otra parte, la fiscalía dispuso que los videos que mostraban al sospechoso fueran difundidos a través de los medios de comunicación.
Luego de algunos datos fallidos, que rápidamente fueron descartados por los investigadores, una persona se presentó y aseguró que reconocía al hombre de la imagen, fundamentalmente por su particular forma de caminar.
La PDI lo tomó muy en serio cuando sus peritos pudieron analizar las redes sociales del hombre denunciado. Se trataba de Ortiz, quien aparecía en fotos con zapatillas, pantalón y abrigo totalmente compatibles con los observados en los videos de la investigación.
Ya estaba preso
Los detectives buscaron a Ángel Ariel Ortíz y lo hallaron en una celda de la Cárcel de Bouwer, en las afueras de la ciudad de Córdoba. Es que tiempo después del crimen de Paglia había sido arrestado como presunto autor de varios robos en aquella jurisdicción.
Durante el operativo en que este hombre había sido arrestado, la policía cordobesa incautó teléfonos celulares que ahora fueron remitidos a la PDI santafesina, en cuyos laboratorios serán peritados.
Por otra parte, los uniformados de la “docta” no hallaron ropa similar a la que vestía el presunto autor de Paglia. Los investigadores presumen que descartó la vestimenta luego de cometer el crimen, porque -por las características del ataque- debe haber estado muy manchada con sangre.
El fiscal Marchi también señaló que en una casa vecina a la de la familia Paglia fue hallado un cuchillo, presumiblemente el arma usada por el homicida. Este elemento será peritado en los próximos días, para cotejar posibles rastros que lo vinculen con Ortíz.
Cautelar
La prisión preventiva para Ortíz fue ordenada por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Sebastián Szeifert, en una audiencia desarrollada este viernes en los tribunales de la capital provincial.
El fiscal Andrés Marchi está a cargo de las diligencias del caso y además es quien solicitó la medida cautelar de máxima. Al respecto, valoró que “aunque la Defensa propuso alternativas, tras escuchar los argumentos de ambas partes el magistrado hizo lugar a nuestro requerimiento”.
“Más allá de que el imputado estaba privado de su libertad en la provincia de Córdoba, donde es investigado por delitos contra la propiedad cometidos poco tiempo después del homicidio, resultaba imprescindible que también fuera cautelado con prisión preventiva en nuestra jurisdicción”, manifestó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación.
“A partir de lo resuelto, el imputado no podrá evadirse de la Justicia santafesina en el caso de que cambie su situación en el otro proceso penal”, explicó.