El 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, creado para aumentar la concientización global sobre esta enfermedad en todo el mundo.
Contrariamente a lo que muchos piensan, en un estadío temprano tiene reversión. De ahí la importancia de un diagnostico precoz.
El 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, creado para aumentar la concientización global sobre esta enfermedad en todo el mundo.
La diabetes es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce insulina en forma suficiente o cuando el organismo no la puede utilizar en forma eficaz. La insulina es una hormona que regula el azúcar en sangre. El efecto de la Diabetes mal controlada es el aumento de la glucosa en sangre, lo que daña muchos órganos y sistemas, especialmente los vasos sanguíneos. 1 de cada dos diabéticos no lo sabe, de ahí que se la llame como una enfermedad silenciosa.
Los principales tipos de diabetes son:
-Diabetes tipo 1: hay producción insuficiente de insulina, por lo que es indispensable la administración diaria de esa hormona. Es la menos frecuente y se da en niños y adolescentes.
-Diabetes tipo 2: hay utilización ineficaz de la insulina. Se produce mayormente en personas adultas, pero están aumentando los casos de este tipo de diabetes en niños durante los últimos años. El 90% de los adultos diabéticos padecen diabetes tipo 2.
-Gestacional: se produce durante el embarazo, donde se constata aumento del azúcar en sangre.
-Otros tipos menos frecuentes.
El Litoral conversó con el médico Antonio Saleme (M.P. N.º 4306), Jefe del Servicio de Endocrinología y Metabolismo del Sanatorio Santa Fe de la capital provincial, sobre esta enfermedad para conocer más sobre ella.
-¿Por qué la diabetes es un enfermedad silenciosa?
-La diabetes es una enfermedad silenciosa porque salvo cuando el azúcar en sangre está muy muy alto, no produce ningún síntoma. Hasta que aparecen las complicaciones. O sea, podés tener el azúcar alto y no tener ningún síntoma por años y luego de que pasaron esos años con glucosa alta o con azúcar en sangre alta, aparecen complicaciones como por ejemplo en la retina, en el ojo, en el riñón y en los grandes vasos como pueden ser las coronarias o los vasos del cerebro. Pero hasta tanto, hasta que no aparezcan esos síntomas que ya son complicaciones y daño de algún órgano, la diabetes puede no producir ningún síntoma.
-¿Se la puede prevenir? ¿Cómo?
-La diabetes se puede prevenir con alimentación adecuada y actividad física frecuente y de esa manera poder mantener nuestro peso adecuado. La mayoría de las veces la diabetes se asocia con sobrepeso y con obesidad que la anteceden y después aparece. La diabetes es como una consecuencia.
-¿Qué rol juega la genética o “la cuestión hereditaria” en esta enfermedad?
-La genética juega un rol importante en la diabetes, pero siempre para que esa genética se manifieste, o sea, aparezca la enfermedad, tenés que darle un entorno favorable. O sea: vos podés tener tu mamá, tu papá o tus abuelos con diabetes, tener el antecedente personal, pero si vos tenés hábitos de vida saludable, como te decía antes, haces actividad física, te alimentás de manera adecuada, mantenés tu peso, posiblemente la diabetes, esa genética, no se manifieste, o se manifieste mucho más tarde en el tiempo.
En cambio, si vos le das un entorno favorable, si tenés sobrepeso, si tenés obesidad, si sos sedentario... esa genética se va a poner de manifiesto seguro y lo va a hacer más tempranamente. Así que tener antecedentes familiares no quiere decir que si o si vas a tener diabetes, tenés que vos darle el entorno para que la genética, desfavorable en este caso, aparezca como una enfermedad.
-¿De la diabetes se vuelve o una vez declarada es un camino de ida?
-Hoy la diabetes se puede revertir. De hecho, está muy en boga lo que se llama reversión. No remisión, porque remisión es como, de alguna manera, que la enfermedad desaparezca. Pero si reversión que quiere decir que podés lograr que en este caso los valores de azúcar en sangre se normalicen. A veces con el uso de medicamentos e idealmente sin el uso de medicamentos.
Hay un estudio muy grande en el cual pacientes que recién se diagnosticaban de diabetes les daban una dieta de muy bajas calorías y la mayoría de ellos perdía peso y la diabetes desaparecía sin ningún fármaco, así que sí sabemos que se puede revertir pero, digo de nuevo, eso va asociado a un cambio de estilo de vida bastante marcado que la mayoría a veces los pacientes no lo pueden lograr. Pero sí se puede revertir la enfermedad.
Diferente es si un paciente ya lleva diez años de diagnóstico y está con dos o tres remedios para la diabetes; ahí ya es más difícil pensar una reversión, pero cuando está recientemente diagnosticada ese es el momento para intentar revertirlo.
-¿Qué tener en cuenta para sospechar de que una persona puede ser diabética?
-Los síntomas de la diabetes aparecen cuando la glucosa está muy alta. Por eso, como decía antes, es una enfermedad silente. Porque mientras está alta la glucosa, no produce síntomas. Ahora cuando está muy alta, sí. Los pacientes orinan mucho, tienen mucha sed, pierden peso.
Tienen cansancio y visión borrosa. Esos son los síntomas cardinales. Y además, tienen hambre. O sea, comen mucho e igualmente pierden peso. Si tenés esos síntomas, tenés que hacerte un análisis. Si estás orinando mucho, tenés mucha sed, perdiste peso, esas tres cosas se llaman las 3P. Poliuria, polidipsia, pérdida de peso. Es inminente que te hagas un análisis para ver si no tenés diabetes.
-¿Cómo se diagnostica?
-La diabetes se diagnostica de una sola manera que es con la glucosa elevada en sangre, glucosa elevada en ayuno o glucosa elevada después de lo que se llama prueba de tolerancia oral a la glucosa que es una prueba en la cual al paciente se le saca sangre en ayuno, se le da un jugo azucarado con determinada cantidad de agua y determinada cantidad de azúcar y a las dos horas se le vuelve a sacar sangre para ver si no tiene el azúcar muy alto después de esa carga de glucosa que se le da, o sea que se puede diagnosticar tanto en el ayuno como después de esa carga de glucosa o cuando el azúcar da más de 200 en cualquier momento del día y el paciente tiene los síntomas que contaba antes, principalmente perdida de peso, orinar mucho y tener mucha sed.
-¿Tiene tratamiento? ¿Cuál o cuáles?
-La diabetes tiene tratamiento, claramente. El principal de ellos, y asociado a lo que te decía de esto de remisión de la diabetes, es alimentación adecuada y actividad física, y descenso de peso en la mayoría de los pacientes que tienen sobrepeso u obesidad, lo cual es muy complejo porque cambiar hábitos es mucho más difícil de lo que todos pensamos.
Después tiene tratamientos con medicamentos, con fármacos. La diabetes tipo 1, que es la cual hay un déficit de insulina, necesita como único tratamiento de la insulina. La diabetes tipo 2, para la cual contamos con un montón de tratamientos diferentes, especialmente tratamientos no insulínicos y hoy, especialmente tratamientos que ayudan a descender el peso, no solo la glucosa, sino que hoy tenemos fármacos que descienden, que ayudan al descenso del peso de los pacientes y con eso buscar la remisión de la enfermedad, como te decía antes.
-¿Preocupan las cifras actuales de esta enfermedad, tanto en adultos como en niños?
-Sí. Preocupa y mucho, y está asociado al aumento en la obesidad. Hoy sabemos que el 40% de los habitantes de Argentina tienen obesidad. Y 50% tienen sobrepeso. Así que las cifras de diabetes van aumentando de la mano a medida que aumenta justamente esta otra enfermedad. La madre de todos los males, de la diabetes, de la hipertensión, del colesterol alto, de apnea de sueño, hígado graso, y un montón de otras patologías que tienen como origen el sobrepeso o la obesidad puntualmente. Y lo mismo está pasando en niños. Tenemos cifras de obesidad en niños que nunca antes habíamos tenido, tanto en Argentina como en el resto del mundo. Entonces empieza a aparecer la diabetes tipo 2, que era la diabetes del adulto, en niños con obesidad. Así que claro que preocupa, y la prevención se hace principalmente con medidas a nivel político o gubernamental, con medidas orientadas a la prevención de la obesidad puntualmente.
-Por último, un mensaje en el marco del 14 de noviembre, Día Mundial de la Diabetes.
-En este 14 de noviembre del 2023 el lema es “Educar para proteger el futuro”. Educar al paciente con diabetes para proteger el futuro. Pero a mi me parece que educar al paciente ya es una instancia tardía. Y adonde tenemos que apuntar para proteger el futuro es educar a los niños. Educar a los niños, especialmente en las escuelas, teniendo una materia, por ejemplo, como nutrición, que sea de la misma importancia que la actividad física o incluso matemática. Si tenemos una chance, va a ser ahí. Y ahí vamos a proteger el futuro, educando a los niños. Así que mi enfoque sería empezar a tener políticas de Estado apuntadas a ese objetivo.
El lema de este año es educar al paciente con diabetes para proteger el futuro. Pero a mi me parece que educar al paciente ya es una instancia tardía. Adonde tenemos que apuntar para proteger el futuro es educar a los niños. Educar a los niños, especialmente en las escuelas, teniendo una materia, por ejemplo, como nutrición, que sea de la misma importancia que la actividad física o incluso matemática. Si tenemos una chance, va a ser ahí. Y ahí vamos a proteger el futuro, educando a los niños. Así que mi enfoque sería empezar a tener políticas de Estado apuntadas a ese objetivo.