La FIA confirmó que no realizará cambios inmediatos en el documento de directrices de pilotaje para las dos últimas rondas del campeonato. El organismo lo anunció mediante un comunicado oficial, señalando que la lista de recomendaciones para los comisarios se mantendrá sin modificaciones por ahora.
La esperada reunión se desarrolló el jueves por la noche en el circuito de Losail, en la previa del Gran Premio de Qatar. Tal como se anticipaba, el foco estuvo puesto en las directrices de pilotaje, un documento que generó intensos debates durante 2025 y que volvió a quedar en el centro de la discusión tras varios fallos controvertidos.
Introducidas en 2022 para aportar coherencia al trabajo de los comisarios y hechas públicas este año con el objetivo de mejorar la transparencia, las directrices suelen ser cuestionadas por los pilotos. Aunque oficialmente no son reglas, sino referencias, muchos sostienen que la aplicación termina siendo excesivamente literal, sin contemplar la dinámica real de una maniobra en carrera.
“Hoy realmente nos estamos ciñendo al libro”, expresó Charles Leclerc, de Ferrari, antes del encuentro. “Y eso hace que sea difícil usar sentido común en algunas situaciones específicas”.
Los incidentes analizados
Aunque la FIA no detalló los intercambios de la reunión, sí confirmó que se revisaron cinco incidentes destacados de la temporada, en un “debate sincero, abierto y colegiado”.
El más reciente fue el choque en Interlagos entre Kimi Antonelli, Oscar Piastri y Leclerc, una maniobra que derivó en una penalización de 10 segundos para Piastri. Muchos pilotos la consideraron injustificada, aunque los comisarios defendieron que el castigo estaba en línea con las directrices.
También se revisaron dos accidentes que habían generado fuertes repercusiones:
Carlos Sainz vs. Liam Lawson en Zandvoort, donde Sainz recibió una sanción de 10 segundos que luego Williams logró revertir por vía administrativa.
Oliver Bearman vs. Sainz en Monza, que terminó con penalización para el joven piloto británico.
Ambos casos alimentaron la preocupación de que una lectura demasiado rígida del documento lleve a decisiones alejadas del contexto real de la maniobra. La crítica más repetida: las directrices incentivan a “correr hasta el vértice” para cumplir con la letra del reglamento, aun cuando esa acción no sea natural ni segura en una situación de carrera.
La FIA admitió que podrían realizarse nuevas modificaciones una vez finalizada la temporada, pero no dio detalles ni un plazo concreto. Los otros dos incidentes analizados estuvieron vinculados a los límites de pista:
El intercambio entre Leclerc y Max Verstappen en México, por “salirse de pista y obtener ventaja”.
La maniobra entre Lando Norris y Leclerc en Austin, en la que se discutió si un piloto que supera los límites en un intento de adelantamiento debe ser automáticamente sancionado.
Conclusiones de la FIA
Si bien no se anunciaron cambios concretos, sí se establecieron cuatro conclusiones principales:
Más decisiones post-carrera cuando falten elementos.
La FIA admitió que podrían realizarse nuevas modificaciones una vez finalizada la temporada, pero no dio detalles ni un plazo concreto. La FIA expresó preferencia por que ciertas sanciones se definan después del GP, con la posibilidad de escuchar a los pilotos involucrados. Es un punto que Sainz ya había reclamado tras Zandvoort.
Reconocimiento de que las directrices no cubren todos los escenarios.
Se remarcó la importancia de contar con un piloto-comisario experimentado en cada panel. No hubo mención a la propuesta de comisarios permanentes, que había sido impulsada por varios pilotos.
Mayor énfasis en el respeto a las banderas amarillas y en la seguridad general.
Se discutirán medidas adicionales para reforzar protocolos.
Revisión de los procedimientos de banderas azules.
La FIA evaluará posibles aclaraciones para definir mejor el comportamiento esperado de los rezagados.
El organismo destacó además que las directrices actuales fueron revisadas y acordadas con la GPDA, recordando la participación de los propios pilotos en su elaboración.
¿Qué puede pasar en 2026?
Por ahora, el panorama es incierto.
La FIA admitió que podrían realizarse nuevas modificaciones una vez finalizada la temporada, pero no dio detalles ni un plazo concreto. Lo único confirmado es que la versión vigente del manual seguirá sin cambios en las últimas carreras de 2025, pese al creciente reclamo de los pilotos por una aplicación más flexible y contextualizada.