Más allá de los libros: la clave del éxito universitario reside en el bienestar físico y mental
El rendimiento académico va de la mano con la salud física y mental. Expertos del Sanatorio Santa Fe, recomiendan a los estudiantes realizar pausas activas, conservar una buena nutrición y definir técnicas de estudio para reducir el estrés, ansiedad y malos hábitos que suelen aparecer durante esta etapa.
Más allá de los libros: la clave del éxito universitario reside en el bienestar físico y mental
La vida universitaria es un desafío que va más allá de las horas de estudio y los exámenes. Para alcanzar un rendimiento académico óptimo y una experiencia plena, los estudiantes deben prestar especial atención a pilares fundamentales como el ejercicio físico, una alimentación adecuada y una sólida salud mental.
Expertos del equipo de salud del Sanatorio Santa Fe, consultados por este medio, ofrecen valiosas recomendaciones para que los jóvenes construyan un equilibrio que potencie su desarrollo integral.
Nueve de cada diez personas antes de los 30 años padecen un episodio de dolor lumbar o cervical.
El movimiento como motor del aprendizaje y la salud postural
Permanecer largas horas sentado, una constante en la vida del estudiante, puede acarrear serias consecuencias físicas, como dolores lumbares y cervicales, considerados "la epidemia silenciosa del momento" por el Lic. Alejandro Enjuto, kinesiólogo y fisiatra del Sanatorio Santa Fe y parte del cuerpo médico del Club Atlético Colón.
Enjuto enfatiza que "lo más importante es que la gente no esté mucho tiempo sentado", promoviendo la incorporación de pausas activas.
Estas pausas, que surgieron en el ámbito empresarial para mejorar la productividad, consisten en breves momentos de movimiento (10 a 15 minutos, cada dos horas aproximadamente) que no solo alivian la tensión física, sino que también estimulan el cerebro y mejoran la concentración. El kinesiólogo sugiere ejercicios sencillos como mover brazos, estiramientos, e incluso incorporar tareas neurocognitivas.
Además, destaca la importancia del movimiento como una forma más de aprendizaje, equiparándolo a la lectura o el material audiovisual. Ante el creciente sedentarismo, Enjuto señala que "nueve de cada diez personas antes de los 30 años padecen un episodio de dolor lumbar o cervical", subrayando la urgencia de integrar el movimiento en la rutina diaria.
Nutrición estratégica: combustible para el cerebro y el bienestar general
La alimentación es otro pilar esencial, a menudo descuidado por los estudiantes, especialmente aquellos que inician su vida independiente. La Lic. en Nutrición María Virginia Borga, del Sanatorio Santa Fe, identifica como errores frecuentes la falta de organización para las compras y la preparación de comidas, así como el salteo de estas.
Estos hábitos repercuten directamente en el rendimiento académico y la salud mental, ya que una buena nutrición optimiza las funciones cognitivas y físicas.
Borga recomienda seis comidas diarias para un estudiante universitario, incluyendo un desayuno liviano, colaciones a media mañana y tarde (frutas, frutos secos), almuerzo y cena. La clave, insiste, está en la organización y planificación, lo que permite ahorrar dinero y asegurar una ingesta nutritiva. Entre los alimentos indispensables en la alacena de un estudiante, la nutricionista destaca:
La alimentación es otro pilar esencial, a menudo descuidado por los estudiantes.
Huevos: versátiles, económicos y fuente de proteínas.
Carnes: aportan hierro y vitamina B12, cruciales para el estudio.
Harinas integrales, avena y lácteos: opciones de calidad para la energía y la salud digestiva.
Frutas y verduras: indispensables, con al menos tres frutas y dos porciones de verduras al día.
Asimismo, Borga enfatiza la vital importancia de la hidratación, recomendando tener siempre una botella de agua a mano, ya que la sed es un indicador de deshidratación y afecta el rendimiento. La fatiga, el cansancio, cambios de peso y la sensación de desgano son señales de alerta que indican la necesidad de consultar a un profesional de la nutrición.
Equilibrio emocional, el sostén del camino universitario
El estrés académico y los desafíos que implica mudarse para estudiar pueden impactar significativamente la salud mental de los estudiantes universitarios. La Lic. en Psicopedagogía Julieta Mordini, del Sanatorio Santa Fe, subraya la importancia de establecer hábitos saludables desde el inicio del ciclo académico para lograr un buen equilibrio emocional.
Rutinas de estudio y descanso: organizar el tiempo con agendas o planificadores semanales.
Ocio y actividad física: incorporar momentos de recreación y ejercicio.
Redes de apoyo: conectarse con otros estudiantes y fomentar vínculos.
Expectativas realistas: aceptar el error como parte del proceso de aprendizaje.
Para el estudio, Mordini aconseja técnicas como el subrayado, esquemas, mapas mentales, fichas de repaso, y la Técnica Pomodoro (bloques de estudio de 25 minutos con pausas de 5). También destaca el "efecto de esparcimiento", que implica repasar contenidos en varias jornadas para una mejor consolidación de la memoria.
El estrés académico puede impactar significativamente la salud mental de los estudiantes universitarios.
Frente a laansiedadpor los exámenes, la psicopedagoga sugiere la planificación anticipada, técnicas de respiración y relajación (como el mindfulness), ensayos de examen y la revisión de pensamientos negativos automáticos. El estrés académico sostenido puede generar bloqueos cognitivos, afectar la concentración, la memoria y la motivación, manifestándose en irritabilidad, aislamiento social, problemas de sueño o dolores de cabeza.
Para quienes se mudan lejos de sus familias, los desafíos incluyen la adaptación a un nuevo entorno, la distancia emocional y la asunción de nuevas responsabilidades. En estos casos, desarrollar la autonomía, la autogestión emocional y buscar apoyo en espacios institucionales o personas de confianza resulta crucial.
En definitiva, el éxito en la vida universitaria no se mide únicamente por las calificaciones. Un abordaje integral que priorice el bienestar físico y mental se erige como el verdadero camino para potenciar las capacidades de los estudiantes y asegurar una experiencia enriquecedora y saludable.