Un problema que cada vez se observa más frecuente en las aulas es el de la miopía en la infancia. Docentes y una oftalmóloga dialogaron con Viví Mejor sobre esta problemática.
Docentes y una especialista dialogaron con Viví Mejor sobre esta problemática que se ve cada vez más en el ámbito escolar.

Un problema que cada vez se observa más frecuente en las aulas es el de la miopía en la infancia. Docentes y una oftalmóloga dialogaron con Viví Mejor sobre esta problemática.
Leticia Reyt, médica Oftalmopediatra (Mat. 3389) explicó que la miopía es la patología ocular más frecuente y se caracteriza por ver borroso de lejos, con riesgo de complicaciones que pueden impactar gravemente en la visión y la calidad de vida futura de quienes la padecen.
En niños se puede desarrollar por predisposición familiar asociada a otras enfermedades sistémicas, genéticas, metabólicas o del tejido conectivo, asociada a otras patologías oculares.
Los síntomas más frecuentes, según Reyt son: "Se observa que acomodan distancia, se arriman a las cosas, por ejemplo, televisor, pizarrón, cuaderno. Entrecierran los ojos para enfocar mejor y pueden presentarse cefaleas".
"Es una problemática creciente por el acceso temprano y la gran exposición a pantallas cercanas que favorece el desarrollo en niños predispuestos", sostuvo la especialista.
Maia Leonardt, profesora de Artes Visuales e Italiano, afirmó que "es considerable el número de personas que hay con miopía. Esto depende de las condiciones en las cuales viva cada persona y de lo que se puede ofrecer desde la escuela. Por ejemplo, la distancia de las butacas respecto a la del Pizarrón puede dificultar el asunto, al igual que el tamaño de la letra que use la o el docente en tal caso".
"Los dolores de cabeza, el entrecerrar los ojos para ver, la falta de concentración o sobre-esfuerzo para ella, dificultad para ver a cierta distancia que al momento de escribir en la carpeta las cosas no tengan sentido y estén incompletas", destacó Leonhardt que son algunos de los síntomas que como docente pueden indicar que se está frente a algún problema visual.
Por su parte, Irene Laspina, profesora de Inglés, manifestó: "En mis 12 años de docencia primaria he notado que los niños más chiquitos, especialmente en primer grado, no quieren copiar, se olvidan letras o directamente no aprenden y molestan en la clase porque a veces no saben cómo pedir ayuda o ni siquiera se dan cuenta que no ven bien".
Reyt detalló sugerencias para prevenir la miopía en los niños y niñas en edad escolar:
Cuándo realizar los controles oftalmológicos
En las recomendaciones de la Sociedad Argentina de Oftalmología Infantil, se recomienda realizar los controles oftalmológicos al recién nacido, a los seis meses, al año de vida, a los tres, a los cinco "y luego de ese momento cada dos años, aunque se aumenta la frecuencia de los controles y se observa progresión de la miopía", concluyó Reyt.
"Como medidas de prevención, sugiero que se hagan charlas informativas en las plenarias ya que a veces los mismos docentes no tenemos conocimiento de cuestiones ligadas a la salud física y somos quienes estamos por muchas horas en algunos casos con los niños. Dichas charlas también podrían darse para el alumnado", sostuvo Leonhardt.
Añadió: "También sería importante priorizar a aquellos niños con dificultad de visión para que se puedan sentar más adelante y de ser posible, ubicar los bancos en U para que nadie tape a nadie.
Respecto al aula, las pizarras son ideales. Allí la letra es mucho más legible y comprensible, además de que no hay polvillo por la tiza o el borrador (en caso de que haya). A su vez, la letra del docente debe ser grande, clara y legible".




