Puro eclecticismo y esplendor: un viaje al corazón arquitectónico del Teatro Municipal de Santa Fe
Elementos clasicistas, ornamentos de la arquitectura italiana y francesa, una cúpula de la Sala Mayor que es una joya patrimonial, además de la cúspide de la fachada del Coliseo local, las claves. La explicación de un experto.
Puro eclecticismo y esplendor: un viaje al corazón arquitectónico del Teatro Municipal de Santa Fe
Cuenta el acto fundacional del Teatro Municipal “1° de Mayo”, que cumple 120 años de vida, que el diseño de semejante obra fue encargado al arquitecto argentino Augusto Plou. Formado en Francia, continuó la línea de los teatros “a la italiana”, también conocido como estilo Luis XV.
Se sabe, además, que el grupo escultórico de la fachada del edificio de esta capital provincial fue creado por el italiano Nicolás Gulli, y que la pintura del cielo raso abovedado de la Sala Mayor corresponde a Nazareno Orlandi. En 1918 se le otorgó la denominación “1° de Mayo”, como homenaje a la sanción de la Constitución Nacional de 1853.
¿Qué características arquitectónicas tenía aquella corriente “a la italiana”? Esta denominación surge de los arquitectos renacentistas italianos. Es el teatro de balcón, que difiere del grecolatino, que era un teatro de gradas o en tribuna”, explicó a El Litoral el arquitecto Carlos Falco, quien hace 25 años fue un reconocido director del Coliseo local.
Para el Arq. Falco, la cúpula es “una gran joya arquitectónica”. Crédito: Fernando Nicola
“Lo que se hizo fue reemplazar las gradas por los balcones y techar el edificio. Plou y muchos otros siguieron una tipología de teatro, un tipo de edificio. Y las ornamentaciones, los estilos y ornatos son algunos italianos, pero otros franceses. Entonces, a esto se lo llama estilo ecléctico, porque hay varios elementos de distintos orígenes”, precisó luego.
Más clasicista que modernista
—La idea de eclecticismo, ¿se relaciona con el modernismo arquitectónico? —consultó El Litoral al especialista.
—No. El modernismo es otra cosa. Es un estilo más cercano al art nouveau, una vanguardia artística y arquitectónica de fines del siglo XIX, que aquí en Santa Fe no tuvo mucho auge. Hay más edificios modernistas, por ejemplo, en Rosario.
Aquí, en el Teatro Municipal, aunque tiene guirnaldas y otros elementos modernos, predominan los rasgos clasicistas. Por ejemplo, ese gran arco que está en la puerta del Teatro es más bien de estilo clásico. Sin lugar a dudas, nuestro Coliseo local tiene elementos eminentemente eclécticos.
El contexto y la socialización
—Si se tiene en cuenta el contexto histórico argentino durante las primeras dos décadas del siglo XX, con las olas inmigratorias, ¿el diseño del Teatro acompañó ese momento social del país? —se le consultó a Falco.
—Sí. El edificio fue de gestión municipal y la Municipalidad de Santa Fe aportó los fondos para su construcción. En la ciudad capital de aquel entonces existían colectividades muy fuertes, sobre todo la italiana y la española, que eran amantes de los géneros “chicos”.
Por géneros “chicos” se entiende la zarzuela, la opereta, el vodevil, entre otros. No debemos olvidar que en esa época el teatro era un lugar de encuentro social fundamental.
En lo alto de la fachada, sus extraordinarias ornamentaciones. Crédito: Fernando Nicola
En aquella Santa Fe no existían muchos otros espacios para reuniones sociales. Por eso, estos teatros tienen lo que se llama foyer, un ámbito de encuentro.
Donde actualmente se ubica la Sala Marechal, en los intervalos de las óperas, operetas y zarzuelas se reunían los hombres a hablar de negocios, mientras que las mujeres conversaban de otros temas (risas). La burguesía santafesina era muy fuerte. Más allá de esto, el Teatro Municipal era un espacio privilegiado de socialización e interacción.
“Máquina italiana”
El espacio escénico del teatro es “una suerte de máquina italiana —agregó Falco—. ¿Qué es una máquina italiana? Es un sistema de cuerdas que sostiene los telones desde una altura superior a la de la sala. El techo del escenario es casi el doble que la cúpula sobre la Sala Mayor”, explicó el experto.
Toda esta máquina se maneja con cuerdas y con la gravedad: “Allí se cuelgan los telones, las partes del escenario, las bambalinas. Es un sistema de ingeniería: todo se maneja por gravedad”.
Otro ornamento (escultura) que se roba las vistas del teatro. Crédito: Fernando Nicola
“Un ejemplo gráfico: si se quiere mover un telón, se bajan las varas hasta el piso y luego se izan mediante un sistema de poleas. Todo esto, además, sin dejar de lado la gran acústica que tiene el Teatro”, añadió.
Joyas
—¿Cuáles son, desde el punto de vista arquitectónico y patrimonial, las "joyitas" del Coliseo? —consultó El Litoral al arquitecto Falco.
—Primero, creo que es un edificio muy armónico en todas sus partes. Tiene hallazgos de diseño muy interesantes y bellos. Pero, si me tuviera que quedar con un lugar, elegiría la organización de la cúpula.
La cúpula del teatro es una obra maestra. Está construida con pequeñas piezas de madera, colocadas una al lado de la otra siguiendo las curvas, y colgada de una estructura general de hierro. Es una obra de ingeniería maravillosa.
Y cómo coronan esa postal los balcones del Paraíso, con esas cariátides (estatuas) que miran hacia la sala... Es un diseño extraordinario. Yo me quedo con ese lugar: es una joya. Es un tipo de arte que ya no se hace. Por eso hay que cuidarlo mucho y garantizar un mantenimiento continuo, con las inversiones estatales necesarias —concluyó Falco.