Kiwi: la fruta versátil que cuida el intestino y ayuda a controlar el colesterol
Rica en fibra, vitamina C y potasio, esta fruta tropical no solo mejora la digestión y combate el estreñimiento, sino que también ayuda a reducir el colesterol malo y cuidar la salud cardiovascular.
Kiwi: la fruta versátil que cuida el intestino y ayuda a controlar el colesterol
El kiwi, además de ser jugoso y sabroso, es una fuente potente de fibra, vitamina C y potasio. Su consumo regular contribuye al buen funcionamiento del sistema digestivo y favorece la reducción del colesterol LDL, el llamado “colesterol malo”, ayudando así a prevenir enfermedades cardiovasculares.
El kiwi ayuda a controlar el colesterol.
Una fruta pequeña con grandes aportes
Cada kiwi mediano aporta alrededor de 48 calorías, más de 2 gramos de fibra, unos 150 miligramos de potasio y cerca del 62 % de la dosis diaria recomendada de vitamina C. Esta combinación lo convierte en una opción saludable para fortalecer el sistema inmunológico, facilitar la absorción del hierro y regular la presión arterial.
A diferencia de otras frutas como la banana o la manzana, el kiwi ofrece mayor densidad nutricional en menor volumen, lo que lo vuelve ideal como colación rápida y nutritiva. Además, gran parte de su fibra se encuentra en la piel, por lo que se recomienda consumirlo entero.
La fibra soluble e insoluble del kiwi actúa directamente sobre el tránsito intestinal. Ayuda a ablandar las heces, favorece su paso por el intestino y mejora la frecuencia de las deposiciones. Por esta razón, especialistas en salud digestiva recomiendan incorporar un kiwi verde al día como una solución natural y efectiva frente al estreñimiento.
Estudios clínicos indican que quienes incorporan kiwi a su dieta notan mejoras significativas en la regularidad intestinal, comparables con algunos laxantes, pero sin efectos secundarios. Por su sabor y textura, muchos pacientes lo prefieren frente a otras opciones como las ciruelas.
Una fruta pequeña con grandes aportes.
Protección cardiovascular
Gracias a su alto contenido de fibra, el kiwi colabora en la eliminación del colesterol LDL antes de que llegue al torrente sanguíneo. De este modo, reduce el riesgo de acumulación en las arterias y protege la salud cardiovascular. Es una alternativa natural eficaz para quienes buscan cuidar su corazón mediante la alimentación.
Además, el kiwi contiene trazas de melatonina y serotonina, dos compuestos asociados al ciclo del sueño. Si bien algunos estudios preliminares sugieren que podría contribuir a mejorar la calidad del descanso, los especialistas advierten que aún no hay evidencia científica suficiente para afirmarlo con certeza.
Una forma práctica y saludable de consumir kiwi es incorporarlo con su piel, especialmente en su variedad amarilla, que presenta una textura más suave. También puede sumarse a licuados, ensaladas de frutas, yogures o simplemente como snack entre comidas.
Más allá del modo de preparación, su consumo habitual puede traducirse en mejoras digestivas, menor colesterol y mejor calidad nutricional en la dieta.
El kiwi se consolida como uno de los alimentos más completos dentro de las frutas frescas. Su combinación de sabor, propiedades digestivas y beneficios cardiovasculares lo convierte en un aliado esencial para una alimentación equilibrada y preventiva. Ideal para todas las edades y fácil de incorporar, es una opción inteligente para quienes buscan mejorar su bienestar desde la cocina.