Cristina Copes, la artista y gestora cultural que dejó una huella imborrable

“Llegó el tan temido apagón final para la querida Cristina Copes. La recordaremos incesante e incansable como la artista, la gestora cultural y la compañera entrañable que siempre fue y será. Nos quedan sus risas, su talento, su generosidad y su humildad. Este final es apenas una parte ínfima de la hermosa puesta en escena que ella supo crear para que tantas y tantos la disfrutaramos con gusto”. Estas fueron las palabras que eligió el secretario de Cultura de la ciudad de Santa Fe, Paulo Ricci, para despedir a Cristina Copes, quien falleció el pasado viernes 25 de noviembre a la edad de 79 años.

Las mismas son una buena síntesis de las numerosas muestras de dolor y de profunda admiración que ocuparon las redes sociales durante todo el fin de semana, en general provenientes de la comunidad artística de Santa Fe. Es que Cristina Copes fue, tal como señalaron desde el Centro Cultural Provincial, una destacada creativa y hacedora de la escena teatral santafesina. Copes fue bailarina, coreógrafa, docente y ejerció hasta los últimos tiempos como jurado de los Premios Máscara. Desde ese mismo ámbito la describieron como “la bailarina que creía que se podía bailar hasta con silencios y que sostenía que ‘no existe música imposible de bailar’.

Su nombre era María Cristina López Piamello, pero adoptó como apellido artístico “Copes”. En la infancia aprendió danza folclórica, la danza contemporánea la descubrió en los últimos años como estudiante de abogacía. Su maestro fue Mario Giromini Dross y el espectáculo con el cual inauguró su vínculo con el público fue “Hiroshima”, una obra de danza -teatro en 1974. Estudiosa del campo de la danza, tanto en la práctica como en la teoría, era admiradora del trabajo de la alemana Pina Bausch. “Para Cris bailar era soñar, volar, vivir, pesar, dibujar y sentir”, expresaron desde el Centro Cultural.

Entre los diversos tributos que recibió en estos días y que ponen de manifiesto la huella que dejó en Santa Fe, Malena Bravo, recordó que fue ella quien le abrió las puertas del Centro Cultural Provincial. “Confiaste plenamente en mí para embarcarnos en la aventura de hacer allí cosas juntas. Cosas soñadas con la grandeza y la infinitud que tienen los sueños. Nunca nos íbamos a imaginar que se gestaría esa gran fiesta que terminó siendo el ‘Festiclown’”.

Las palabras que compartió Mariana Rabaini en sus redes sociales también revelan lo que significó Copes para los artistas: “nos enseñaste a movernos, a producir nuestras obras, a confiarnos, a pisar un escenario sabiendo lo que iba a pasar pero dispuestas a que todo cambie. Nos formaste como artistas, a ser críticas, a amar la Danza”.