Pullaro se refirió al crimen de Jeremías Monzón: "La pena tiene que ver con el delito"
El gobernador santafesino se refirió al homicidio del adolescente y sostuvo que el sistema penal debe responder con mayor firmeza frente a hechos de extrema violencia, aun cuando los responsables sean menores.
Pullaro se refirió al crimen de Jeremías Monzón: "La pena tiene que ver con el delito"
El crimen de Jeremías Monzón, el adolescente de 15 años hallado sin vida en la ciudad de Santa Fe, generó gran conmoción. Mientras la investigación judicial avanza y la principal acusada permanece detenida, el caso volvió a poner en el centro del debate el régimen penal juvenil, la responsabilidad de los menores ante delitos graves y el rol del Estado frente a la violencia.
La imputada, de 16 años, fue acusada por el fiscal de Menores Francisco Cecchini como coautora de un homicidio calificado por el concurso premeditado de dos o más personas, alevosía y ensañamiento. Se trata de una de las figuras penales más severas previstas por la legislación vigente.
“Crimenaberrante”
En este marco, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, se refirió al caso y expresó su pesar por lo ocurrido y fue contundente respecto a su postura sobre la edad de imputabilidad. “La pena tiene que ver con el delito cometido y no con la edad de la persona que comete un delito”, sostuvo, y agregó que los parámetros actuales “fueron fijados con otra realidad de la Argentina”.
El cuerpo fue hallado en inmediaciones del Club Colón tras varios días de búsqueda. Crédito: Flavio Raina.
Pullaro remarcó que, en hechos de este tipo, existe plena conciencia del daño que se provoca. “Hoy por hoy un joven de 14 años que va a matar sabe que va a matar, y más en un hecho como este que fue premeditado”, sostuvo, al tiempo que consideró que “desde mi criterio tendrían quetener claramente una pena común mayor”.
El gobernador también contextualizó el caso dentro del escenario de seguridad provincial. “Tenemos un tercio de delitos violentos de los que teníamos hace dos y tres años atrás”, señaló, y explicó que esa baja permite mejorar las investigaciones, aunque reconoció que el desafío sigue siendo prevenir hechos de extrema violencia.
Seguridad, cárceles yun cambio de mirada
Pullaro fue más allá del caso puntual y planteó una visión integral sobre el delito y el sistema penitenciario. “El que comete un delito es un delincuente y le tiene que caer todo el peso del Código Penal”, dijo, diferenciándose de gestiones anteriores que, según indicó, colocaban a los delincuentes violentos en un rol de víctimas del sistema.
En relación con la situación carcelaria, detalló que actualmente hay más de 12.000 detenidos en la provincia y que se está trabajando en una fuerte expansión de la infraestructura penitenciaria. “En 100 años en Santa Fe se construyeron 3.500 celdas. Nosotros, en cuatro años, vamos a construir 3.700”, aseguró.
El caso impulsó nuevas discusiones sobre el rol del Estado frente a delitos violentos. Crédito: Flavio Raina.
El gobernador explicó que este crecimiento responde a una decisión política clara: “Eso es porque hay decisión de que la sociedad pueda vivir mejor”. En ese sentido, destacó la necesidad de aislar a presos de alto perfil y reforzar los controles para evitar que sigan delinquiendo desde el encierro.
También hizo referencia al aumento de mujeres en conflicto con la ley penal. “Hoy tenemos muchas mujeres que identificamos como jefas o colaboradoras de organizaciones criminales”, afirmó, y explicó que eso obligó a rediseñar el sistema penitenciario provincial.
Mientras tanto, desde el gobierno provincial remarcaron que la Secretaría de Víctimas acompaña a la familia de Jeremías Monzón desde el primer día, en un caso que, aunque fue rápidamente esclarecido, volvió a encender una discusión profunda sobre violencia, justicia y responsabilidad penal.