La Cámara de Diputados de la Nación rechazó este miércoles los vetos del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario y a la emergencia sanitaria en pediatría que asigna fondos al Hospital Garrahan.
Con 175-67-2 en Financiamiento Universitario y 181-60-1 en la Emergencia Pediátrica, la Cámara baja rechazó los vetos de Milei y los giró al Senado para la insistencia final. La votación mostró giros, ausencias y disciplinados: qué cambió respecto de la votación original y cómo jugaron los santafesinos.

La Cámara de Diputados de la Nación rechazó este miércoles los vetos del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario y a la emergencia sanitaria en pediatría que asigna fondos al Hospital Garrahan.
En ambos casos, el cuerpo alcanzó la mayoría especial de dos tercios de los presentes, condición que exige la Constitución para insistir con una ley vetada por el Ejecutivo. El próximo paso corre por cuenta del Senado, que deberá repetir con la misma cantidad, aunque en principio tiene más allanado el camino por la escasa influencia del oficialismo.
El rechazo al veto al Financiamiento Universitario se aprobó con 175 votos a favor, 67 en contra y 2 abstenciones. Esa ley, impulsada por el Senado, fija un piso presupuestario del 0,8 % del PIB para las universidades nacionales, autarquía financiera, actualización trimestral de los fondos según el Índice de Precios al Consumidor, y la reapertura de la paritaria docente.
Por otro lado, la Emergencia en Pediatría, destinada a declarar situación sanitaria de urgencia nacional durante un año para enfrentar la escasez de profesionales, insumos y otros recursos en atención pediátrica, también fue ratificada tras el rechazo del veto, con 181 votos afirmativos, 60 negativos y 1 abstención.
El contraste con las sanciones originales ayuda a tomar la dimensión del movimiento. En el proyecto de Universidades se había aprobado por 158-75-5. Fue amplia, pero quedó a un voto de los dos tercios sobre los presentes de aquel día. Mientras que en Garrahan ya había superado el umbral: 159-67-4.
La sesión de este miércoles sumó 15 votos afirmativos a universidades (de 158 a 175), recortó 8 negativos (de 75 a 67) y convirtió abstenciones en apoyos o ausencias (de 5 a 2). En el caso de Garrahan, el salto también fue visible: pasó de 159 a 181 votos afirmativos, bajó de 67 a 60 los negativos y las abstenciones quedaron en una sola.
¿Qué cambió? El tablero mostró que la oposición mantuvo su bloque y recuperó ausentes o abstenciones de la primera vuelta. En el caso de Garrahan, el efecto implicó cambios explícitos de voto hacia el apoyo, además de presencias nuevas respecto de la sesión original.
Los números de la Emergencia Pediátrica indican que de los 98 integrantes de Unión por la Patria fueron 96 los que votaron a favor; 14 de 15 de Encuentro Federal; 11 de 12 de Democracia para Siempre; 6 de 6 de la Coalición Cívica; 4 de 5 del Frente de Izquierda; 11 de 14 de la UCR; 8 de 8 de Innovación Federal y 4 de 4 de Coherencia. Además, votaron por la insistencia 9 miembros del PRO, 3 de Independencia, 2 de Futuro y Libertad, 2 del MID, 2 de Por Santa Cruz, 2 de Producción y Trabajo, y los cuatro monobloques.
El Financiamiento Universitario superó los dos tercios con el apoyo de aliados del oficialismo. Fueron parte de los 175 votos que se opusieron al veto los exlibertarios Lourdes Arrieta, Carlos D'Alessandro, Gerardo González y Marcela Pagano. También hubo 6 integrantes del PRO que votaron en contra del veto: el cordobés Héctor Baldassi; la correntina Sofía Brambilla; la santafesina Germana Figueroa Casas; el larretista Álvaro González; la chubutense Ana Clara Romero -cercana al gobernador Ignacio Torres-; y Silvia Lospennato.
Los ausentes fueron 15 en Garrahan y 14 en Universidades. Los faltazos más notorios fueron los de tres libertarios: la santafesina Rocío Bonacci, el puntano Alberto Arancibia y la misionera Florencia Klipauka Lewtak. Tampoco estuvo presente en la sesión Juan Carlos Giordano de Izquierda Socialista, debido a que estuvo varado en la embarcación que llevó ayuda humanitaria a Gaza.
El comportamiento de los diecinueve diputados nacionales que representan a Santa Fe mostró solidez en el bloque peronista y socialista en tanto que algunos corrimientos en los sectores del PRO.
Los votos santafesinos de este miércoles: en Universidades fueron 12 a favor de insistir con la ley, 4 en contra y 3 ausentes; en Emergencia Pediátrica fueron 13 contra el veto, 3 se expresaron a favor de la decisión presidencial y 3 no estuvieron presentes al momento de decidir.
En comparación con la votación original, el proyecto de Universidades logró más apoyos. Se mantuvieron a favor Florencia Carignano, Diego Giuliano, Germán Martínez, Magalí Mastaler y Eduardo Toniolli (Unión por la Patria); Roberto Mirabella (Defendamos Santa Fe); Mónica Fein y Esteban Paulón (Encuentro Federal); Mario Barletta (Unidos para Cambiar Santa Fe); y Melina Giorgi (Democracia para Siempre).
Se sumaron al "sí" Germana Figueroa Casas (PRO), que en la votación original se había abstenido, esta vez votó afirmativo; y Gabriel Chumpitaz (Futuro y Libertad), que no había estado presente en la sesión anterior sobre universidades, ahora apoyó.
Se mantuvieron en contra Romina Diez (LLA), Nicolás Mayoraz (LLA), Luciano Laspina (PRO) y Alejandro Bongiovanni (PRO). Respecto de la primera vuelta estuvieron ausentes Rocío Bonacci (LLA), Verónica Razzini (Futuro y Libertad) y José Núñez (PRO), que habían votado en contra.
En la Emergencia en Pediatría se ampliaron los apoyos. El núcleo que había apoyado en la primera vuelta ratificó su posición: Carignano, Giuliano, Martínez, Mastaler, Toniolli, Mirabella, Fein, Paulón, Barletta y Giorgi.
Se sumaron al "sí" Chumpitaz, Núñez y Razzini que en la sesión original se había pronunciado en contra. Mientras que Diez, Mayoraz y Bongiovanni volvieron a votar que "no" a las leyes.
Ausentes en el veto sobre la ley Garrahan estuvieron Laspina que tampoco había estado en la votación original; Bonacci que no participó de ninguna de las dos votaciones y había estado en contra en la original; y Figueroa Casas que en la primera vuelta votó en contra de la emergencia pediátrica.




